lunes, 14 de marzo de 2016

Dos son veintiuno: twenty one pilots

Su nombre se debe a un soldado que se suicidó en la segunda guerra mundial al ser culpable de la muerte de 21 pilotos de avión. Muchos habrán tenido como primer acercamiento a esta banda el hecho de que ellos le abrirán concierto a Paramore en México, algunos otros despistados escucharon de ellos antes y la gran mayoría aún no los conoce. Posiblemente sea momento de que lo hagan. Tyler Joseph y Josh Dun tienen una historia qué contar formalmente desde 2011, cuando empezaron a hacer este tipo de música poco común y muy literal en las letras, pero que lleva un fondo musical muy sólido formado por sólo dos personas. A ellos los podremos ver -como mencionamos antes- el 15 de julio en el Palacio de los Deportes abriéndole a ParamoreEn SXSW 2013 tuvimos la oportunidad de presenciar el show en vivo de este dúo y vaya que nos dejó sorprendidos. Con un piano, sintetizador y batería, ellos hacen un sonido rap rock con electrónica, bastante interesante. Ellos se encuentran promocionando actualmente su segundo disco, el cual lleva por nombre Vessel y tiene grandes canciones, como por ejemplo “Guns For Hands”, “Holding On To You”, la poderosa “Car Radio” y “Lovely”. Darle una escuchada a su material los dejará satisfechos.https://www.youtube.com/watch?v=Pmv8aQKO6k0

viernes, 11 de marzo de 2016


El día que sonreír se volvió necesidad. 
Eh vuelto a casa, como todos los días, adaptándome a una vida rutinaria, soportando mentes sucias y mediocres, siguiendo la corriente para no verme tan distante ni antisocial. Mi madre no se ha percatado, no hice ruido al entrar, ella, como si el mundo no tuviera una guerra a unos cuantos países de aquí, como si a la vuelta no existiera un par de niños sin hogar, como si el gobierno no estuviera creando nuevos planes para hacernos creer que nos benefician sus torpes alternativas cuando prácticamente nos está jodiendo la  vida, el futura y la mente. Sigue ahí, reposando es el cómodo sofá, inquietada de no tener ninguna notificación hace 15 minutos, agobiada de no poder aprender rápidamente a usar ese aparato.
Recuerdo sus manos moviéndose rápidamente por encima de las telas, de esos hilos, ese papel que hacía parecer una flor, creando adornos, tarareando un par de canciones, brincando, recuerdo su sonrisa tan grácil, y el olor a comida, saliendo de la cocina. Ahora simplemente parece reír por razones absurdas, un par de vines que hacen bromas supongo graciosas.
Hace tiempo que me eh tragado esas ganas insólitas de hablar con alguien, mi hermano ha dejado de jugar por la casa, de hacer sus reuniones, de salir con sus amigos, comprendo que el sol es cruel, y cala por las tardes, este no sería tan cruel si nosotros no utilizaríamos y provocaríamos tantas radiaciones, conexiones con satélites artificiales que penetran la capa de ozono volviéndola más frágil.
Quisiera volver hacia el pasado, unos 40 años atrás, podría así advertirles a todos que sonreír en un par de años va a ser una obligación, una máscara de felicidad falsa.
-Walker, levántate es navidad!!!!
Abro mis ojos, y me doy cuenta de que el televisor que hace unos minutos estaba  frente a mi cama, me levanto y dirigiéndome a las escaleras parece ser que por la ventana está la vista que tanto soñaba, en el pasado.
La sala está llena de adornos, las paredes son de madera, el árbol navideño poso entre miles de cajas de regalos, y un ambiente lleno de alegría sin tecnología que interrumpa la ocasión.

Fue la pesadilla más terrorífica que puede haber soñada, deseo que no se haga realidad, aunque la noche anterior desee tanto que la sociedad se actualizara… 
El uso de las tecnologías en la vida cotidiana, influye mucho en nuestras necesidades, hasta el grado de depender de ellas. No es lo mismo para un ser humano de la actualidad, cocinar en una fogata que en una estufa eléctrica. Pues la idea de hacer para el humano todo más fácil y cómodo ya ha rebasado el limite de la naturaleza humana.

Seamos sinceros; ¿A quién le interesaría volver a unos años atrás y quedarse viviendo toda la vida en un monte sin electricidad?  Creo que lo que más nos importa es la comodidad, unos cuantos movimientos y obtenemos en un dos por tres las cosas. 
Es impresionante como la mente humana ha llegado a cierto limite de curiosidad que ahora el 40% de su curiosidad toma en cuenta los recursos que podría dañar el medio ambiente.  
He estado pensando en cómo sería la vida si volviéramos unos 8000 000 años atrás aún con la mentalidad de que si seguimos avanzando podríamos causar estos dalos que ahora existen en nuestro contexto. Es impredecible tener una respuesta, a veces ni siquiera es bueno pensar en el pasado, los recuerdos se estancan en la tierra, desmoronándose año tras año, quizás exista un ciclo dentro de unos años el mundo vuelva a destruirse y empezar de nuevo, quizás simplemente explote hasta dejar nada en la faz de la tierra, en la órbita del universo, y será insignificante para la vida ahí afuera, en el espacio, porque prácticamente, un planeta menos, no es nada menos... 

lunes, 29 de febrero de 2016

Un refugio
No es de recordar, a veces recurro a mi imaginación, otras veces lo sueño, es como soñar el pasado un poco borroso; Una tarde de primavera, escuchaba gritos, gritos dolorosos, y suspiros profundos, escandalosos, una mujer no muy joven, sufría en su vientre, yo, no sabía lo que pasaba. No recuerdo si llovía, quizás solo era una breve brisa sin prisa, como la idea de querer salir entrando al mundo, a una vida llena de emociones, sorpresas, dolor, sentimientos… todo iría bien, hasta el momento en que estando fuera, no sabría qué hacer con el tiempo, con mi entorno, con la vida. Hasta entonces, según el tiempo pasado, o quizás perdido entre extraños momentos, un 24 de marzo del 2001, comencé a deambular por este misterioso mundo.
Mi infancia fue desabrida, en una época en donde la tecnología comenzó a sobresalir entre los humanos, no sabía si salir a la calle a jugar era mejor que quedarme jugando videojuegos como lo hacían todos. Por desgracia, mis hermanas comenzaban una etapa confusa; la adolescencia, quedándome así con sus viejos juguetes, y su triste ausencia. Yo hablaba con alguien, entre las paredes de la habitación, jugaba con alguien, bajo las camas de mis familiares, corría con alguien, entre los pasillos de la casa, reía con alguien que a mi madre le preocupaba. Tendía a hacer que mi madre sirviera comida en el plato de alguien, y si, realmente me divertía mucho con alguien. Alguien que apareció, recurrió a mi cuando no tenía amigos, lo quise y aún lo quiero mucho, pero ahora solo existe en un cuaderno, unas páginas que escribí  para ese alguien. La inocencia desapareció muy pronto, haciéndome ver lo aburrido que eran los días, empecé a brincarme momentos una inocente epifanía, llena de colores, diversión, y pase a una etapa mayor, un poco adulta, con el contexto en el que me desarrollo, con la ideología de mis 4 hermanas, retroalimentar la mía, y me deje de juegos y tonterías que me hubiese gustado seguir. Aprendía a leer y entablar conversaciones más allá de un color favorito, de un personaje animado, más allá de una niñez.
Me gusta una conversación llena de cuestiones, me gustan unos oídos que escuchan lo que pienso, me gustan unos ojos, que ven mis misterios, me gusta una boca que me grite y me susurre, me gustan unos brazos que son vulnerables ante todo cuando me abrazan, y son tan valientes y fuertes ante la vida. Ella es más que un humano, más que una mujer, más que una señora, más que mi madre, más que un ángel, es una diosa, en ella hay algo que no se puede descifrar ni con palabras, es tan dócil mostrando su coraje día a día, demostrando su poder ante todas las cosas. Podría hacer muchas cosas sin ella, incluso vivir, pero si por ella no fuera, me faltaría todo, aunque este lejos, está dentro de mí, y eso es magia, la magia de su corazón.
Él es un contraste, por fuera se ve rudo, fuerte, es un poco frío, bromista, incluso machista, me gustan sus ojos, porque son los únicos que delatan lo que realmente es por dentro, es vulnerable con muchas cosas, pero sobre todo con la música de los 70’ 80’ y 90’. Ambos somos muy bromistas, me gusta esa parte porque  hace una conexión de pequeños eslabones que estallan entre el cariño que nos tenemos.
He estado pensando en eso que nos conecta, a mí y a mis 4 hermanas mayores, las 5 somas tan distantes, tan diferentes a su manera, unidas como los dedos de una mano. Juntas creamos un babel increíble, me gusta cada una de ellas a su manera, como eso que las hace vulnerables, o lo que las hace rudas, todas somos como una sola, es fascinante la confianza entre nosotras.  Pero, es por ellas la causa de mi tortura mental.
Los fines de semana suelen ser muy monótonos, algunas veces nos vamos a las montañas, o a lugares fuera de la ciudad, a veces acampamos, pero la mayoría son de estar en casa, ver películas, leer libros, escuchar música etc.
Un refugio es un rincón, a veces oscuro, a veces brillante, un refugio no solo es un sitio, a veces sofocante, a veces despejado, un refugio no solo te acoge en los buenos y malos momentos, un refugio no es solo un par de personas apoyándote; mi refugio es muy distinto a una familia, es una dócil acogida que vuelve vulnerable mis furias, vuelve fuerte mi parte débil, vuelve esperanza lo que ya no tiene remedio, vuelve oportunidad lo que el tiempo ya ha perdido, vuelve amor lo que muchas veces odié, simplemente vuelve delicada la vida, llena de gozo, de satisfacción, un refugio, en donde la familia está conectada por el arte de amar, es una prioridad  para seguir viviendo con emoción la vida.



sábado, 27 de febrero de 2016

Espiándote
Esperas la mañana, para salir hacia el ocaso,                                                caminas por el bosque, por un túnel opaco,                                                    tu cabello se mueve, entre el frio y seco viento, 
pisas las hojas que tira el otoño soñoliento.

Tolero el tiempo, me acercaré a tu mente,                                                        extraño el vacío, lo llenas pacientemente,                                                       escucho tus suspiros, cuando inhalas el aire frio,
me escondo entre los robles, tu tiempo es el mío.

Ocasos opacos, describen tus pasos,                                                                caminan sin prisa tus pies tan escasos,                                                            tus huellas se hunden, aun las distingo
seguiré tus pistas, hasta llegar contigo.